En 2023, Andalucía experimentó un notable crecimiento en el número de emprendedores, con un 6,8% de la población involucrada en iniciativas empresariales. Este repunte refleja una mayor confianza en el entorno económico y en las habilidades necesarias para emprender. Además, ha mejorado el acceso a infraestructuras y programas de apoyo empresarial, factores que han impulsado la actividad en la región. Sin embargo, el informe GEM (Global Entrepreneurship Monitor) también revela que la tasa de abandono empresarial ha subido, situándose en un 2,7%, superando la media nacional y mostrando un aumento en los cierres de negocios.
Un aspecto relevante es que el 52% de las nuevas empresas andaluzas no cuenta con empleados, lo que limita su potencial de crecimiento y la creación de empleo en la región. A pesar de esto, Málaga y Cádiz destacan como las provincias más dinámicas en cuanto a emprendimiento, con un ecosistema empresarial más activo y prometedor que en otras partes de Andalucía.
El informe también subraya los retos que enfrenta la región, especialmente en el ámbito de la educación emprendedora, donde persisten carencias significativas. Aunque existen programas de apoyo, aún es insuficiente la formación que capacita a los emprendedores para enfrentar los desafíos del mercado. También se identifican problemas en el acceso a la financiación, un obstáculo recurrente para los nuevos negocios, que dificulta su sostenibilidad y crecimiento a largo plazo.
Este panorama refleja una dualidad en el emprendimiento andaluz: mientras más personas se animan a crear negocios, la falta de empleados y las altas tasas de abandono empresarial evidencian áreas de mejora clave. A pesar de estos desafíos, Andalucía sigue avanzando en la consolidación de su ecosistema emprendedor, apoyándose en infraestructuras cada vez más robustas y en un creciente interés por parte de la población. Las provincias más activas, como Málaga y Cádiz, lideran este impulso, generando oportunidades para quienes desean iniciar nuevos proyectos.